viernes, 13 de abril de 2007

En el centro de dos escenas
La actriz que la próxima semana iniciará en Bahía Blanca la gira nacional de "La duda", estuvo anteanoche en otro debut: el de la tercera temporada de "Mujeres asesinas".

La actriz Gabriela Toscano debutó en el reconocido unitario Mujeres asesinas que inició anteanoche su tercera temporada en la pantalla de Canal 13.
Pero ese fue apenas un episodio en el presente profesional de la actriz que, mientras espera una definición acerca de la puesta en marcha de la segunda temporada de la versión argentina de Amas de casa desesperadas , despliega su talento sobre las tablas con La duda.
En la obra que antes protagonizara Susú Pecoraro, es ahora Gabriela quien acompaña a Fabián Vena. Lo hace en una gira que la próxima semana la traerá por nuestra ciudad, y bajo la dirección de Carlos Rivas, su marido y el mismo que la guió recientemente en La prueba.
"Es muy regocijante hacer teatro y cargar la mochila. Por eso, ahora que estamos arrancando una gira por Bahía Blanca y Montevideo, siento que estoy de vacaciones", aseguró.
Toscano admitió que subirse al tren de un éxito ya probado como resultaba La duda , no resultó tarea sencilla.
"Al principio, me sorprendió. Tenía otros proyectos y no quería hacer más de una cosa por vez. Me dio un poco de miedo la convocatoria".
Contó que conocía la obra y la había visto en nuestro país y en los Estados Unidos. Que ensayó seis horas diarias durante un mes, menos de la mitad del tiempo que destinaron sus compañeros a ese mismo preparativo.
"Después de los nervios iniciales, me concentré en la historia que tenía que contar. Ahora creo que la obra está lista, pero siempre se necesitan algunos ajustes. Suelo decir que la labor teatral es como el té: hay que esperar que se asiente para tomarlo".
La sombra de la duda Actriz, esposa y madre, Toscano suele recordar que entre sexto y séptimo grado de su educación primaria quiso ser monja.
"Mi directora era la hermana Victoria, una mujer de mucho carácter y disciplina, pero con buen semblante", describió quien, en La duda interpreta a la hermana Luisa, la directora del colegio religioso San Nicolás de las Hermanas de la Caridad, en el Bronx neoyorkino de la década del '60. La mujer duda, precisamente, de la honorabilidad de un profesor.
"En broma, en mi familia me dicen que cumplí el sueño de ser religiosa", añadió.
Pero nada de esto se relaciona con su instrumento de intérprete.
"No suelo hacer trabajo de campo. Me concentré en el comportamiento de esa religiosa, que es mucho más tosca de lo que soy yo. Cuando voy componiendo el personaje, empiezo a creerme ese rol y aparecen nuevos aspectos. En eso consiste ser actor: en trabajar el instrumento. Pero lo tengo que mantener. Nunca está completamente listo", aseguró.

Una doble prueba
La prueba fue la primera experiencia de trabajo de Toscano a las órdenes de su marido.

"La superamos porque los roles estén bien claros y, al margen de esta obra, hacemos un buen equipo creativo. Yo propongo muchas cosas y necesito un director que sepa escuchar y aceptar sugerencias. El te lleva por un camino y, sin darte cuenta, terminás haciendo lo que quiere. Y tiene algo muy importante: sigue corrigiendo mientras pasan las funciones", comentó. "Mi hijo Bruno nos dice `¡basta de hablar de teatro!' Pero para nosotros este trabajo es una pasión y sentimos un gran placer al hacerlo juntos. No lo digo porque sea mi marido, pero él sabe mucho de la naturaleza del actor y de cómo contar una historia. Me siento protegida y con posibilidad de desarrollarme como actriz", confirmó.

Donde domina la puerilidad

"Para mi gusto, la televisión está infantilizada y es el reflejo de quiénes somos, pero también hay otros que quieren ver otras cosas y esos están esperando", fundamentó Toscano. La intérprete que en la pantalla chica brilló en ciclos como Culpables y Amas de casa desesperadas , consideró que "ahora no hay muchos programas para adultos y esperemos que Mujeres... dé un nuevo empuje inicial para que haya otros".

"El espectador a veces se resiste a lo nuevo y a crecer, pero es necesario forzar un poquito las cosas y dar más opciones".

Pese a esta intencionalidad, arriesgó que se hace necesario formar espectadores, pero hay que ver quiénes son los maestros porque la tele implica probar productos en bruto.

"En televisión --detalló--, se trabaja con la intuición de uno y con la ayuda del equipo. Es como meterse en un túnel e ir rapidito en busca de la luz".
Habiendo atravesado esa prueba para ser, por primera vez, parte del unitario Mujeres asesinas , apuntó que fue un nuevo desafío que concretó después de rechazar otros ofrecimientos.
La mala, mala
La temporada 2007 del envío sobre casos reales que acaban trágicamente y que escriben Marisa Grinstein y Liliana Escliar, comenzó con "Rita, burlada" en el que Toscano compartió protagónicos con Adrián Suar, Dolores Fonzi y Carlos Belloso.
"Justo me tocó empezar junto con Adrián para encarnar a una mujer a la que le ha ido muy mal en la vida, que ha tenido una hija muy joven, que está desesperada y deprimida y que se engancha con el primero que le pone una mano en el hombro", relató.
El personaje a cargo de quien también dirige los destinos del 13, fue el de un hombre que realiza prácticas esotéricas y que la engaña y le va sacando toda la plata.
Con dirección de Daniel Barone, el vínculo termina violenta y definitivamente después de que el impostor le pide un gesto de sacrificio y ella lo deja a solas con su hija.
"Todas las de Mujeres... son historias fuertes y sencillas en que el condimento está en cómo se presentan", opinó.

Desesperada, y no tanto
-- ¿Volverá este año "Amas de casa desesperadas"?
-- No sabemos nada. Iba a retornar en marzo o abril, pero ahora está en stand by.
-- ¿El último programa diario que hizo fue "Media falta", en 2005. ¿Le escapa a las tiras?
-- Sí. En las tiras todo se va escribiendo sobre la marcha y esos cambios van inventando un personaje muy diferente al original. Todo es muy urgente y estresante. Prefiero hacer cosas como Amas de casa... o Culpables , que ya están escritos y dan un poco más de tiempo de elaboración. Sin embargo, reconozco que las tiras son muy emocionantes.
-- ¿Es posible mantener una carrera regular sin hacer exposición mediática?
-- Es difícil mantener una carrera a partir de las elecciones profesionales. Pero muchas actrices lo logran. Se debe estar en el medio, seguir trabajando y ubicarse en una línea de conducta. Hay una nueva generación de chicos que empiezan la carrera, se crían en la televisión y no en las salas de ensayo, van del canal a la casa y de la casa al canal. Y para ser buen actor, uno tiene que crecer en la vida, ver lo que pasa alrededor y ser una persona sensible.
"Los personajes que se crían en la pantalla comienzan a ser televisivos las 24 horas del día y no tienen mucha relación con el mundo real. No alcanzan capacidad de desarrollo. Los actores debemos tratar de contar historias y que la gente pueda reflexionar en torno a ellas. Para eso estamos". (Télam)

Fuente: Diario La nueva Provincia Bahía Blanca • viernes 13 de Abril de 2007

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